viernes, 24 de julio de 2009

Asalto al tren Pelham 123

Tony Scott es el irregular hermano de Ridley. Los protagonistas vuelven a ser como en el film del 74 de Joseph Sargent: los tuneles del metro de NY. Solo que ahora el maquinista del conwoy tiene internet y la velocidad de comunicacion es impresionante con lo que el bueno, Denzel Whasington, el malo, John Travolta y el feo, John Turturro van mas rápido que la formula 1 y por tanto de culo. Decálogo moral sobre los códigos y valores de las buenas personas, no sobornos, si catolicismo que resbala como el aceite sobre la violenta acción y entorpecen como el pegamento a la posible intriga. Otro remake de diseño, que no hacia falta para nada, efectista y limitado al mismo tiempo, que obliga al buen cinéfilo a rebuscar en el videoclub o rezar al TCM.
Por un quitame allá este resfriado el pobre de James Grandolfini, casi emula a sus antecesores en el descubrimiento del pastel del guión ahora de Brian Helgeland que ya colaboro con Scott en A quemarropa con tanta o mas adrenalina por fotograma, Un Scott que dale que te pego con su estética sin sutilezas, con electrocutados visuales, con crispación ,planos teóricamente psicológicos. la cámara montada en unos caballitos o tiovivo y magnificando con el ordenador lo que la inteligencia narrativa no consigue.
A caballo entre el film de policías y el de desastres, la velocidad sobre los railes sin freno, hacen que la buena novela de John Godey. origen del film , se estrelle contra los topes del fin de trayecto, invalidando el secuestro tenso y modélico de unos de los vagones mas concurridos del metro (subway) para conseguir el rescate. La pregunta es, cuanto vale hoy en día el kg. de carne de neoyorquino?.

3 comentarios:

rosa ventura dijo...

L'has "clavat"! Ahir la vaig veure.
Sort que s'hi estava fresquet... i algú va aprofitar per fer una bona migdiada.

joan salvany dijo...

moltes gracies. bolet cinefil

rosa ventura dijo...

De res. Un plaer.